La experiencia védica

La experiencia védica quizás puede refrescar la memoria de un hombre sobre su vida en la tierra; le puede recordar que él, al igual que sus antepasados, ha acumulado las experiencias más extraordinarias y ha alcanzado una profundidad de visión, sentimiento y vida que ahora necesita redescubrir urgentemente si quiere hacer frente con éxito a las olas del océano de la tecnología, la ciencia y otros mecanismos modernos que amenazan su supervivencia misma.

El hombre es un ser que celebra. La celebración transmite un sentimiento de solidaridad cósmica, de fraternidad humana y a menudo de un acompañamiento divino a causa del cual todas nuestras acciones son litúrgicas, significativas y expresivas, de manera que expresan lo que es ahora y crean lo que está a punto de ser. La celebración es la conciencia de los ritmos de la vida y la observancia festiva de su frecuente repetición.

Hay dos prácticas que se podrían recomendar. Una es el silencio y la calma totales, el vacío y la nada, la eliminación activa de todos los obstáculos para dejar que el Espíritu actúe sin estorbos. La otra práctica es la tradicional oración de la mañana y de la tarde, hecha de alabanza y que surge de una mezcla de temor y esperanza, de contemplación e impulso hacia la acción. Esta oración es humana y concreta. Integra en sí misma todos los aspectos de la vida humana en la tierra.

                                                                                                                                                       Raimon Panikkar

 

Tropezamos con la misma piedra y como el curso pasado nos volvemos a poner ante otro gran texto (1.100 páginas) de nuestro maestro de Tavertet:

  • Panikkar, Raimon (2014).  L’experiència vèdica. Mantramanjarī. Antologia dels Veda per a l’home modern i la celebració contemporània [1977]. (Opera Omnia Raimon Panikkar IV.1). Barcelona: Fragmenta.

Único, singular, inmenso, vasto, selvático, profundo, intenso, sugestivo, iluminador, revelador … pero de lectura estimulante y gratificante.

Los Veda son uno de los corpus de literatura religiosa más antiguos de la humanidad, y constituyen, además, uno de los primeros documentos literarios de la India (entre el 2000 y el 1000 aC). Se trata de una de las manifestaciones más fascinantes del Espíritu, a juicio de Raimon Panikkar. La epifanía védica forma parte del patrimonio de la humanidad. Por eso, la mejor manera de ponerse al servicio de su función más profunda es compartirla con un espíritu de fraternidad con el conjunto de la humanidad. Es lo que hace Panikkar con esta magna antología de los Veda: compartir con los lectores los mejores textos de las escrituras védicas, debidamente contextualizados y comentados.

Este libro propone un auténtico camino iniciático que, siguiendo el ritmo de la vida del cosmos, nos lleve al nacimiento de la Vida plena en nosotros. Camino antropocósmico que se despliega y se nos ofrece en seis partes ligadas por una séptima, como un ramo de flores vivas, un pomo de mantras (mantramanjarī):

I Aurora y nacimiento - II Germinación y crecimiento - III Florecimiento y plenitud - IV Ocaso y decadencia - V Muerte y disolución - VI Nueva vida y libertad - VII Crepúsculo.

En cada parte, capítulo, sección van apareciendo los textos védicos, desde los Veda más antiguos pasando por Brāhmaṇa, los Āraṇyaka, las Upaniṣad hasta la Bhagavad Gītā; una secuencia que se repite una y otra vez, en un sentido que va desde una conciencia exteriorizada y cósmica hacia el despertar de una conciencia interiorizada que va descubriendo el menos profundo (ātman), pero que finalmente puede descansar en el experiencia adual (advaita) de ātman-brahman, en una conciencia que puede decir y exclamar: Sí! Amén! Om!

El trabajo con este texto entusiasmó a todos los miembros del seminario. Una escritura que danza, nada que ver con el seco estilo filosófico-teológico de El ritmo del Ser, quizás por qué en su redacción, que duró más de diez años, Panikkar contó con la inestimable colaboración de cuatro mujeres: Nelly Shanti, Mary Rogers, Bettina Baum y Maria Bidoli.

En definitiva, una aportación imprescindible para toda persona interesada en la tradición hindú, pero que también será, en nuestro país, de referencia obligada y fundamental para los estudios sanscritista y de las tradiciones índicas, como ya lo es ahora el Diccionario Sánscrito-Catalán de Oscar Pujol.